Se encuentra en la mayoría de los productos que compramos en el supermercado ¡e incluso en nuestros platos!
Actualmente, la preocupación ambiental por el uso de plásticos es uno de los temas más comentados a nivel mundial. Su creciente consumo en los últimos años le ha llevado a ser uno de los principales contribuyentes a la contaminación en todos los rincones de nuestro planeta, y más concretamente en el mar, destino final de gran parte de estos residuos.
Se puede encontrar en playas, rocas, flotando en aguas e incluso en las zonas más profundas. Cada año, los mares y océanos reciben unos 12 millones de toneladas de desechos, incluidos 8 millones de toneladas de plástico.
A esta cifra hay que añadir los microplásticos, fragmentos inferiores a 5 mm que proceden de la rotura de piezas de mayor tamaño o que han sido fabricados a este tamaño (es el caso de las microesferas presentes en productos de higiene y limpieza como exfoliantes, dentífricos detergentes que se no retenido en los filtros de los centros de tratamiento.
Estudios científicos han demostrado que un gran número de animales marinos las ingieren y que esto afecta a su dieta y a su reproducción. Finalmente, terminan en nuestros platos y también nos envenenan.
Para luchar contra ello, en Washaby hemos apostado por una política de cero plásticos ofreciendo envases sólidos, reciclados, reciclables y biodegradables si algún día acaban en la naturaleza.
Optar por no consumir productos sin envase de plástico es el primer paso para presionar a las multinacionales y a los supermercados a que los eliminen de sus productos y fomentar un consumo 100% responsable.
¡Únete a la revolución ecológica! ¡Únete al movimiento de Washaby!